La segunda parte de este viaje tenía como destino Novi Sad, ciudad capital de la provincia de Vojvodina. Está a unos 110km de Belgrado y tiene una población de 215.659 habitantes (por los 228.348 de Elche) . Para ir a esta ciudad madrugamos bastante y cogimos un tren desde Belgrado con destino a esta ciudad.
Ayuntamiento de Novi Sad en la plaza mayor
El tren volvió a sorprendernos, sobretodo porque era un tren regional de media distancia. Sin embargo el tren era un ejemplo de limpieza y comodidad, rayando la exquisitez. Habían limpiadoras que vaciaban las papeleras, incluso con el tren en marcha y pasaban varias veces. Los asientos eran sofás de terciopelo, sin una sola mancha a la vista, poniendo en entredicho algunos trenes húngaros y españoles... Además había servicio a bordo y las azafatas eran muy simpáticas.
Con este panorama, no era fácil mantenerse despierto en el tren…
Billete de tren. El choletako de vainilla serbio, tenía un sabor raro pero no estaba mal…
Llegada por tren a Novi Sad, cruzando el Danubio
De lo primero que nos encontramos por allí. Cerca de la estación dominaban los colores grises y sombríos y las grandes avenidas.
Ana feliz con su nuevo paraguas rosa
La región de Vojvodina tiene mucha riqueza lingüística, el serbio en sus dos formas cirílica y latina convive oficialmente con el húngaro. Esta región perteneció no hace muchos años a Hungría, por lo que no poca gente por aquí se considera de etnia magiar. A la derecha puesto de zapatillas en donde hay unas del Barça.
Teatro municipal a la izquierda. Y a la derecha Alberto, Pili, Ana y Michael en la plaza mayor.
Peleas de mujeres????. A la derecha Springfield de rebajas en Novi Sad.
Iglesia principal de Novi Sad en primer plano. Abajo a la izquierda el millor cotxe del món també a Novi Sad y a la derecha todos menos el autor de la foto junto a un gran parque cerca del Danubio.
Las chicas junto al lago.
En primer plano el nuevo Застава 10 (Fiat Punto con licencia para ser fabricado en Serbia) Abajo algunos de los clásicos de la ex Yugoslavia de la marca Застава (Zastava), en primer plano Застава Skala, abajo izqda el y a la derecha Застава Yugo, el mito.
Castillo de Petrovaradin junto al Danubio. Abajo bulevares junto a la ladera del río.
Vistas de Petrovaradin desde su castillo. Petrovaradin en sí misma es una población separada de Novi Sad solo por el Danubio.
La cima de la colina era el punto más alto de la ciudad.
La lluvia y el invierno propiciaban melancólicas escenas desde lo alto del castillo.
Vistas de Novi Sad desde el castillo de Petrovaradin
En primer plano, estación de trenes JIS con un enorme anuncio de la cerveza Helen Pivo. Abajo a la izquierda un autobús que nos quería mucho. A quién demonios se le iba a ocurrir hacer eso?¿¿?¿!! (abajo derecha).
Nada más llegar, nos encontramos con una ciudad también algo sombría, quizá debido al mal tiempo, pero conforme avanzábamos hacia el centro descubrimos que ésta era una ciudad muy elegante, muy restaurada. Se notaba que Hungría había estado por allí (sí cómo no los húngaros también estuvieron en Novi Sad Újvidék en húngaro). Las calles con edificios muy elegantes, con colores muy vivos. La verdad es que no hicimos mucha cosa en esta ciudad, tampoco es que llegásemos muy temprano porque el trayecto en tren duró como dos horas y media.
Lo más interesante de esta ciudad era el Castillo de Petrovaradin y las vistas que tenías desde lo alto del mismo. Por allí mismo me preguntó un joven soldado serbio, que dónde estaba la parada de autobús del castillo, cuando le respondí me preguntó, ¿qué haces aquí en Novi Sad?, Rubén y yo dijimos, "turismo", a lo que respondió con caraflipao, ¿con este tiempo??!?
Al igual que Belgrado, esta ciudad también intenta sobreponerse a su pasado, ya que en 1999 fue duramente bombardeada por la OTAN como respuesta a la guerra de Kosovo.
Poco más os puedo decir sobre esta ciudad, ella también fue bombardeada duramente por la OTAN, atacando principalmente a la refinería de esta ciudad (dudoso objetivo militar), provocando un desastre ecológico sin precedentes en la zona en 1999.
Los tres puentes de la ciudad fueron derruidos, provocando el pánico en la población.
De aquello ya tan solo queda un nombre de telediario de la época, Novi Sad.
Después de haberme documentado un poco sobre este tema tengo que confesar que toda información que he encontrado es siempre en contra de Serbia, y visto desde un punto de vista exterior a Serbia. Me gustaría conocer cuál es la posición de los conflictos pasados desde el punto de vista Serbio.
La gente quiere olvidar, aunque me marché de este bonito país pensando que quizá tengan cierto recelo, una cierta sensación de resentimiento hacia occidente por el trato que se le dio al país tiempo no muy atrás. La verdad es que me hubiese gustado hablar con alguien sobre este tema, pero las circunstancias, unido a que es un tema un tanto espinoso me lo impidieron.Ese occidente el cual a la vez ansían para borrar de una vez por todas, en forma de aperturismo y democracia, aquellos momentos de dolor y sufrimiento. Sinceramente creo que en un futuro no muy lejano lo van a conseguir, transformándose en un país próspero y con un futuro prometedor.
Hasta siempre Serbia...
Pronto me pondré con la tercera parte, en donde empezará la parte más emocionante y fascinante para mi, Bosnia Herzegovina.
Un abrazo a todoss